EL ABANDONO EMOCIONAL

Ese sentimiento que nos hace sentirnos rotos al pensar que ya no pertenecemos al clan familiar. Que quien nos daba un soporte, ya no está o no lo puede transmitir y eso nos lleva a sentirnos solos, tristes y abandonados.
El ser humano es un animal social que necesita pertenecer a un grupo. Cuando se ve excluido del grupo comienza a sentir un abandono, un abandono emocional, que forma un vacío interno inconsciente. Este vacío nos obligará a sentir que nos falta algo y que necesitamos llenarlo con aquello que más se parezca a lo que allí existía anteriormente, para que nos produzca un mínimo de satisfacción, de plenitud. Pero que por desgracia, no se suele mantener lleno mucho tiempo y cada vez que sintamos que se vacía rápidamente, buscará la manera de llenarlo sin analizarlo, provocando una infelicidad constante, lo que dará paso a la inseguridad de poseer algo y esto nos llevará al apego emocional.

Pero, ¿es esto cierto? ¿realmente estamos solos en algún momento de la vida? Resulta que cada vez que te miras en el espejo ves a una persona que siempre está y a la que no prestas demasiada atención. Si esa persona fuera otra diferente a ti y siempre te acompañase en todo momento, no te sentirías abandonado, ¿cierto? Ahora piensa, ¿en qué momento te olvidaste de ti para quitarte el valor que te corresponde? Cada uno de nosotros valemos muchísimo pero preferimos devaluarnos como si fuéramos insignificantes y no nos colocamos en nuestro lugar.

¿Quieres saber cual es tú lugar? Dentro de ti mismo, justo ahí donde sientes abandono, porque el verdadero abandono empieza con uno mismo y de esta manera enseñas a los demás a que te pueden abandonar. Como tú no sabes cuánto vales, no puedes enseñárselo a los demás. Por eso es importantísimo empezar con uno mismo.

Empieza por escuchar qué es lo que necesitas de ti mismo, qué es lo que te conecta con tu esencia vital y a partir de ahí trabaja por conseguirlo. Con cada avance regocíjate internamente y con cada bajón prémiate por el camino recorrido. Es un proceso lento que lleva dedicación exclusiva pero que te aportará tanta plenitud que, nunca más sentirás abandono, ya no estarás solo ni te hará falta nadie a tu lado y por increíble que parezca es entonces cuando, todos querrán estar a tu lado.

¿QUIERES LEER MÁS?

REGÍSTRATE EN NUESTRO BOLETÍN Y RECIBE DE FORMA CÓMODA NUESTRAS PUBLICACIONES

¡No enviamos publicidad! Lee nuestra política de privacidad para más información.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *